VILLA MAGISTRAL
La Villa Magistral es la sede del Gran Priorato de la Orden de Malta y es una de sus sedes institucionales. Aquí es donde el Gran Maestre recibe anualmente (enero) en audiencia a los jefes de Estado y embajadores de los diferentes gobiernos acreditados.
Es el centro neurálgico donde han tenido lugar los acontecimientos más importantes de la vida institucional reciente de la Orden. En su espléndida Sala Capitular han sido elegidos los últimos seis Grandes Maestres. Además, desde hace siglos, cada 24 de junio en sus jardines se celebra la festividad de San Juan Bautista, su patrón.
Su interior también alberga la embajada de la Soberana Orden ante la República de Italia y la iglesia de Santa María al Aventino, también conocida como Santa María del Priorato.
Ubicada en el extremo sur del monte Aventino, la Villa Magistral había sido anteriormente un monasterio benedictino. Éste se edificó sobre el palacio que, en el año 939, les donara el príncipe de Roma, Alberico II.
Tras florecer especialmente en los siglos X y XI, hacia finales del siglo XII, el monasterio pasó a ser propiedad de los Caballeros Templarios, los monjes-guerreros que defendían el cristianismo contra la amenaza musulmana.
Para los Templarios, toda la colina Aventina representaba una nave sagrada, única e inmensa, lista para navegar hacia Tierra Santa. El extremo Sur, que desciende hasta el Tíber y se corta como una gran “V”, sería la proa de la embarcación. La puerta de entrada a la Villa representaría el acceso a la bodega de la nave. Los jardines, ubicados tras la puerta, harían las veces del laberinto de los aparejos del barco. Los parapetos del parque equivaldrían a las terrazas de la cubierta. Y el bosque de obeliscos que adornan la plaza no serían más que la propia arboladura de la oculta nave.
En 1312, tras la supresión de la Orden de los Templarios, el convento pasó a manos de los Caballeros de Rodas, la hermandad religiosa y hospitalaria (establecida en Tierra Santa desde 1048) que atendía a los peregrinos que entonces visitaban el Santo Sepulcro. Esta hermandad cambió su denominación en 1522, pasando a ser la Soberana Orden de Malta. Y aquí estableció su sede el Gran Priorato de Roma de los Caballeros de Malta.
Recordaremos que la Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta, más conocida como la Orden de Malta, es una orden religiosa católica. Fue fundada en Jerusalén en el siglo XI por comerciantes amalfitanos. Nació dentro del marco de las Cruzadas y, desde un principio, junto a su actividad hospitalaria, desarrolló acciones militares contra los ejércitos musulmanes (inicialmente árabes, y más tarde también turcos).
Tras un periplo por el Mediterráneo, la Orden se estableció en Roma en 1834. Desde entonces es reconocida universalmente como sujeto de Derecho Internacional, y posee, con garantía de extraterritorialidad, el Palacio Magistral (sede de gobierno) y la Villa Magistral.
La iglesia, también conocida como Santa María del Priorato, es un verdadero tesoro artístico. Fue renovada completamente en 1784 por Giovanni Battista Piranesi, cuyos restos reposan en su interior. Piranesi la decoró con infinidad de referencias arquitectónicas que aluden a la historia y tradiciones de la Orden.
También reestructuró la villa y la plaza que la precede. La plaza la decoró profusamente con infinidad de figuras, lemas y extraños caracteres masónicos (apreciables sobre todo en los obeliscos).
Todo el conjunto conforma un sinfín de mensajes “ocultos”, sólo accesibles a quienes dominan la «simbología esotérica».
Pero eso no es todo…
BUCO DELLA SERRATURA
La Villa Magistral atrae a multitud de visitantes de todo el mundo. Suben hasta aquí para mirar por el Buco della Serratura.
Y es que la pequeña cerradura de la Villa Magistral ofrece un panorama excepcional. Mirando a través de ella, nuestros sentidos, al unísono, podrán captar tres fronteras:
Pisando Italia, podrá verse en el horizonte la cúpula de San Pedro (en territorio Vaticano), mientras tu vista recorre los jardines de la Villa Magistral, que, al gozar de extraterritorialidad, son territorio de la Orden de Malta.
Como curiosidad, en el laberíntico jardín interior de la Villa Magistral, a la izquierda, junto a la entrada, se halla un precioso cedro del Líbano (Cedrus libani). Al parecer, tiene más de 600 años y, presumiblemente, es el más grande y antiguo de toda Europa. Posee un enorme y esbelto tronco, repleto de anchas ramas que cubren todo el entorno, y se dice que Miguel Ángel solía descansar y dibujar bajo su sombra.
La Villa Magistral está abierta al público (previa reserva) todos los viernes, excepto julio y agosto.
