FUENTE DE LA PLAZA DE SANTA MARÍA EN TRASTÉVERE
FUENTES Y PLAZAS

FUENTE DE LA PLAZA DE SANTA MARÍA EN TRASTÉVERE

Como su nombre indica, la Fuente de la Plaza de Santa María en Trastévere (Fontana di Piazza di Santa Maria in Trastevere) preside una de las plazas más emblemáticas de la antigua Roma.

Se halla en medio de la plaza del que se considera el barrio más castizo de Roma: el Trastévere, llamado así por estar “al otro lado del Tíber” (del latín “trans Tiberim” = más allá del Tévere).

Además, ocupa un emplazamiento privilegiado ante la Basílica de Santa María in Trastévere: el primer templo de culto cristiano edificado en Roma (y también el primero dedicado a la Virgen).

Está considerada la fuente más antigua de Roma, y durante muchos siglos fue la única fuente pública existente en el Trastévere. Su presencia se hace remontar hasta tiempos del emperador Augusto (27 a.C.-14 d.C.). Éste, en 2 a.C., hizo construir el acueducto Aqua Alsietina (también llamado Aqua Augusta) para abastecer de agua la zona del Trastévere y alimentar su propia Naumaquia (Naumachia): una gran piscina para espectáculos de combates navales que, en forma de elipse, se extendía entre las actuales iglesias de San Cosimato y San Francesco a Ripa.

Originalmente, la fuente estuvo situada en la orilla de la plaza opuesta a la iglesia. Y en ese lugar permaneció durante varios siglos hasta que reaparece mencionada en época del Papa Adriano I (772-795). Entonces, al no ser potable el Aqua Alsietina, al parecer fue conectada  al acueducto Aqua Traiana (construido por Trajano en 109).

No se volvieron a tener noticias de ella hasta que Nicolás V (Tommaso Parentucelli, Papa de 1447-1455) la hizo reconstruir con motivo del Jubileo de 1450. Entonces, protegida por una balaustrada, se elevó la fuente sobre tres escalones: era una gran palangana cuadrada, de cuyo centro surgían dos cuencas circulares de diferentes tamaños (la superior, menor, despareció al poco tiempo, posiblemente debido al escaso caudal que le llegaba).

Más tarde, hacia 1499, el valenciano Joan Llopis, cardenal de Santa María in Trastévere (y secretario del Papa Alejandro VI, Rodrigo Borgia) la hizo restaurar nuevamente. De la obra, justificada para el Jubileo de 1540, se encargó Donato Bramante, quien removió la fuente para la ocasión, situándola frente a la iglesia. A él se atribuyen también las cuatro cabezas de lobo (emblema familiar de los Llopis), de bronce, que decoran la cuenca superior y de cuyas fauces fluye el agua hasta el gran pilón inferior.

Al finalizar la restauración, el propio cardenal hizo fijar en una de las esquinas de la fuente una placa conmemorativa  (hoy desaparecida). En ella figuraban inscritos unos elegantes versos latinos en los que, bromeando con su apellido, se leía:

 

Si el agua que cae sacude estanques

y con un murmullo leve te ayuda a dormir,

si bebes sorbos claros y te lavas,

tienes que agradecerle al lobo que ha rehecho la fuente,

teniendo en cuenta su interés,

o Rómulus, dime la verdad:

ésto ¿es Lupo quizás menos padre que la loba?

 

Sin embargo, al persistir problemas con el abastecimiento de agua, se conectó a un ramal del nuevo acueducto Aqua Felice. De ello se encargó, en 1604, el arquitecto italiano Girolamo Rainaldi, quien también la restauró, reemplazando la pila de la base por una octogonal.

No obstante, Alejandro VII (Fabio Chigi, Papa de 1655 a 1667) la renovó completamente, trasladándola al centro de la plaza, frente a la iglesia. Y, para solucionar definitivamente los reiterados desabastecimientos de agua, la hizo conectar al acueducto Aqua Paola.

La obra fue realizada en 1659 por Gian Lorenzo Bernini, quien reemplazó la cuenca octogonal de la base, elevándola cuatro peldaños más. También esculpió el escudo de armas de Alejandro VII y un epígrafe conmemorativo en los espejos de la base. Sobre ellos, en lados alternos, insertó cuatro conchas marinas, dobles, y abiertas hacia el exterior.

 

Dibujo de la Fuente de Santa María en Trastévere realizado por Giovanni Battista Falda (1669)

 

Sin embargo, Inocencio XII (Antonio Pignatelli, Papa de 1691 a 1700), descontento con lo realizado por Bernini, encargó a Carlo Fontana su remodelación. Así, en 1692, Fontana amplió el pilón octogonal de la base y reemplazó las conchas marinas de Bernini. En su lugar talló otras cuatro conchas, decorándolas con ricos festones: más grandes y abiertas hacia el interior para recoger el agua que brota de las cabezas de lobo de la pila central.

La reconstrucción de Fontana fue realizada en mármol travertino. Sin embargo, pese a que actualmente mantiene su diseño, en 1873 la fuente fue íntegramente reconstruida. Se reemplazó entonces el travertino por bardiglio (una variedad más consistente de mármol gris). Y en el anverso (exterior) de las conchas se talló, en monótona repetición, el acrónimo SPQR, que publicita la propiedad municipal.

En 1905 la fuente se protegió con una verja de hierro, y así permaneció hasta la década de los años 30. Pero con el estallido de la guerra, presumiblemente desapareció requisada ante las necesidades bélicas.

La última intervención que consta se efectuó en 1984, e incluía tareas ordinarias de descalcificación y limpieza de conductos de agua.

 

fuente de la plaza de santa maría en trastévere

 

Hoy, la Fuente de la Plaza de Santa María en Trastévere sigue siendo el centro neurálgico del Trastévere. Un mágico lugar en que se citan y donde se encuentran los miles de turistas que visitan Roma. Y en el que, al caer la noche, su tenue iluminación nos traslada a un evocador ambiente: inigualable, pasional y ensoñador.

Otro motivo más para regresar y disfrutar de la Eterna Roma.

 

 

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