«TRIUNFOS Y LAMENTOS»
Desde hace varios años se expone en Roma, ininterrumpidamente, un monumental mural titulado “Triunfos y Lamentos”. Puede apreciarse a lo largo del muro de contención que recorre el margen derecho del Tíber, entre el Puente Sisto y el Puente de Giuseppe Mazzini.
El mural está configurado con 80 imágenes (algunas superan los 10 m. de altura). Éstas, a modo de película, se suceden a lo largo de los 550 m. del muro.
Sus emblemáticos y singulares iconos revelan, como en procesión, la constante transformación de la gran urbe a lo largo de la historia, desde sus prehistóricos comienzos hasta la actualidad.
Es obra del artista y director cinematográfico sudafricano William Kentridge (Johannesburgo, 1955), y fue inaugurada el 21 de abril del 2016, en coincidencia con el 2769 aniversario de la Ciudad Eterna.
El artista decoró el muro utilizando la técnica conocida como “estarcido inverso”, sirviéndose de enormes plantillas diseñadas por él mismo. Colocadas sobre el muro, en lugar de utilizar pintura eliminó la mugrienta pátina ennegrecida que recubría la pared con chorros de agua a presión hasta formar las siluetas de las figuras que lo conforman. Un proceso inusual y ecológico, pero lamentablemente frágil y perecedero.
En principio se pensó que «Triunfos y Lamentos» podría perdurar unos diez años. Pero, desgraciadamente, la contaminación atmosférica y el inevitable crecimiento de hongos y líquenes está acelerando su desaparición. Algo también buscado por su autor, quien pretendió mostrar así el efímero transcurrir del tiempo.
En este vídeo podréis apreciar en todo su esplendor la singularidad de este colosal lienzo: