PASSETTO DEL BISCIONE
En Roma, muy cerca de uno de los lugares característicos más visitados por los turistas, se encuentra un pasadizo histórico muy antiguo y misterioso que custodia una imagen de la Virgen María: el Passetto del Biscione. Este lugar se hizo muy popular por los acontecimientos ocurridos en el año 1796.
Este pasadizo, una mini-galería que en época romana conectaba el auditorio del Teatro de Pompeyo con el exterior, conducía a la entrada principal del teatro hasta que éste, tras varios incendios y su desgaste temporal, quedó convertido en ruinas.
En el Renacimiento la noble familia romana Orsini, decide construir su palacio en el lugar, para alojar a muchos huéspedes de honor, como Lucrecia Borgia.
En el lugar donde antiguamente, dentro del teatro, se encontraba el templo dedicado a Venus, los Orsini hicieron construir la Iglesia que actualmente lleva el nombre de Santa Maria in Grottapinta. La iglesia custodiaba una imagen del 700 de la “Madonna del latte” (Virgen de la leche), que luego se trasladó al pasadizo. Se acabó llamando Passetto del Biscione (pasadizo de la serpiente) por la anguila que estaba representada en los escudos de armas de la familia Orsini.
En ese Passeto del Biscione, el 9 de julio de 1796 ocurrió un hecho milagroso extraordinario. La Virgen comenzó a abrir los ojos como si se despertara de un profundo sueño. Abría y cerraba los ojos mientras seguía con la mirada a todos los transeúntes, que se habían reunido con gran asombro ante el anuncio del evento.
El milagro duró por un tiempo. Fueron muchos los que, movidos por la fe, querían ver este curioso acontecimiento. Para llegar al lugar había que “caracolear” entre las estrechas callecitas romanas. Se convierten realmente en un verdadero laberinto, hasta lograr encontrar el pequeño pasadizo, bastante recóndito. La gente se perdía, dando lugar al popular dicho romano “andare a cercare María pe’ Roma” (“ir a buscar a María por Roma”).
Después de que la imagen volviera a cerrar definitivamente los ojos, fue trasladada en procesión hasta la iglesia de San Carlo ai Catenari. Allí se encuentra actualmente.
En su lugar, se colocaron sucesivamente varias imágenes de la Virgen, que fueron destruidas por anónimos actos de vandalismo. Ello condujo al pasadizo a un progresivo deterioro y su posterior ruina.
Hasta que, en 2014, tras meticulosos trabajos, se logró su restauración. En el lugar de la “Madonna del latte” se colocó una reproducción exacta de la “Virgen de la Divina Providencia”. Es obra del prestigioso artista Scipione Pulzone da Gaeta.
En la plaza de acceso, sobre la fachada del edificio que en su día fueran los establos del palacio de los Orsini, hay una Madonnella, un fresco con la imagen de la «Madonna del Latte» (que tal vez deba su nombre a la posición de la mano izquierda sobre el pecho).
Bajo el fresco hay un farolillo para su iluminación, y la siguiente inscripción:
«EN MANIBUS TUIS SORTES MEAE»
(ES MI ALMA EN LAS ANGUSTIAS).